La "ocupación humanitaria" de Libia por la OTAN

Preparándose para evitar cualquier posible contraataque de las fuerzas de Gadafi, las potencias de la OTAN están preparando una "ocupación humanitaria" de Libia, con miles de soldados británicos y estadounidenses, poniendo en riesgo la posibilidad de que las tropas podrían ser enviadas a otro atolladero peor todavía que Afganistán e Irak.

Deseosos de controlar los vastos recursos petroleros del país y sus 144 toneladas de lingotes de oro, un plan para enviar tropas supondría una violación total de la propia resolución de la ONU autorizando la intervención militar, a menos que, por supuesto, los soldados fueran llamados "cascos azules" y se insertaran bajo la cubierta humanitaria.

Hay que recordar que las fuerzas de invasión terrestre de la UE que fueron propuestas en abril se expresaron de manera similar en la retórica humanitaria y sin embargo, habrían sido facultadas para "garantizar los corredores marítimos y terrestres en el interior del país, como objetivo militar transparente".

"Se podrían enviar cientos de soldados británicos en Libia para servir como fuerzas de paz si el país cae en el caos, indicó Downing Street ayer por la noche", informa el Daily Mail .

"Las tropas han estado en espera para Libia desde comienzos de julio. Todos sus kits están llenos y están a la espera de recibir la orden de ir", dijo una fuente.

Del mismo modo, una fuerza de ocupación de EEUU también ha estado en espera durante varios meses.

Como Infowars informó en junio, fuentes militares indicaron que 30.000 soldados de la 1ª División Calvary y III Cuerpo del Ejército en Fort Hood se están preparando para el despliegue militar en Libia en octubre.

Como hemos destacado antes de que el ataque de la OTAN en Libia incluso comenzara, cientos de fuerzas especiales británicas, estadounidenses y francesas fueron enviadas a Libia a finales de febrero para entrenar y dirigir el ejército de rebeldes dirigido por Al-Qaeda. Estas tropas de las Fuerzas Especiales fueron posteriormente capturadas por la cámara confraternizando con los rebeldes, por un equipo de la cadena Al-Jazeera.

El lanzamiento de una ocupación al amparo humanitario sería un eco de como la OTAN ha sido capaz de fabricar un pretexto para la intervención militar en primer lugar, por tener el poder mediático necesario para "convertir" una guerra civil en Libia en una brutal represión de Gadafi, caracteriza a unos rebeldes que se apoderaron de aviones de combate, tanques y  cohetes lanzagranadas como "manifestantes", antes de la aplicación de una "zona de exclusión aérea" que se convirtió en un bombardeo sangriento durante la noche.

También desesperado por aprovecharse de los despojos de la guerra está el Banco Mundial, que ayer anunció su deseo de "ayudar" a la recuperación de Libia, sin duda, al repetir su truco habitual de endeudar a los países con préstamos paralizantes que no pueden devolver y tragarse los activos reales a cambio.

Una vez que la autoridad de Gadafi en Trípoli se derrumbe por completo, que de ninguna manera es una certeza, Libia es probable que descienda a una guerra territorial librada por tribus rivales. Con las fuerzas británicas y estadounidenses que ya están al límite en Irak y Afganistán, y con las economías de ambos países al borde de una recesión de doble caída, comprometerse en un tercer atolladero por seguir interviniendo en una guerra civil  está más allá de la locura.

Mientras que un ejército de ocupación de la OTAN no es un hecho, no hay duda de que ha sido incorporado al calendario como precaución en caso de que las fuerzas de Gadafi montaran un contraataque exitoso. Los informes de hoy sugieren que podría estar ocurriendo, después de las reclamaciones de que el hijo de Gaddafi Saif Al-Islam fue detenido resultaran ser completamente falsas. Al-Islam más tarde apareció en Trípoli y se comprometió a "quebrar la voluntad" de los rebeldes de quien dijo que habían quedado atrapados en la ciudad como parte de una táctica militar deliberada por el régimen de Gadafi.

Hemos sido capaces de dar a conocer el plan de la OTAN de lanzar un bombardeo masivo en Trípoli para poner fin al conflicto antes de septiembre a principios de julio. Al igual que el plazo de septiembre, la OTAN también va a trabajar hasta un punto de inflexión cuando, si es necesario, envie un ejército de ocupación con el pretexto de la ayuda humanitaria para garantizar que todos los restos del régimen de Gadafi son barridos para siempre.

Fuente: http://www.laproximaguerra.com