El misil Bulavá al servicio de las Fuerzas Navales

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2011 ha sido el año crucial en la realización del proyecto militar ruso más ambicioso: Bulavá-Borey. El largo programa de pruebas de misiles estratégicas de emplazamiento marino ha tocado a su fin y estos serán puestos en servicio.

Al propio tiempo entrará en servicio el submarino estratégico portamisiles Yuri Dolgoruki. Este misil se diseñó desde 1998 y su primer lanzamiento se llevó a cabo en 2004. En suma, de los 18 lanzamientos, 11 fueron dados por exitosos. En 2011 Yuri Dolgoruki disparó varios misiles a la vez que resultó ser decisivo para poner en servicio dicho misil en las Fuerzas Navales de Rusia.

En general, el proyecto resultó muy exitoso, considera Igor Korotchenko, redactor jefe de la revista Defensa Nacional.

- A pesar de algunas fallas en la primera etapa, todos los demás lanzamientos fueron acertados, incluido el lanzamiento a la distancia máxima hacia el Pacífico, así como el disparo simultáneo de dos misiles. Teniendo en cuenta el que la cuestión del rearme y del cambio de submarinos estratégicos existentes se plantea con bastante agudeza, porque todos ellos se construyeron en la URSS, el Bulavá es un proyecto sumamente importante y necesario para la Marina de Guerra de Rusia.

El misil fue diseñado en el Instituto Termotecnia de Moscú, tomando en consideración las modernas tendencias en materia de fabricación de misiles de combustible sólido. Este puede portar de 6 a 10 ojivas nucleares hipersónicos de guiado autónomo, puntualiza Igor Korotchenko.

- El misil posee características mejoradas a fin de burlar la defensa antimisiles, tanto la que EEUU monta hoy como las más perfectas de intercepción de misiles que puedan aparecer. El Bulavá es prácticamente invulnerable.

Durante el vuelo previsto, las ojivas, a cuenta de maniobras autónomas en el tramo final de la trayectoria, pueden reapuntarse y crear una situación de incertidumbre para los complejos de intercepción, señala el experto. Las ojivas están provistas de gran número de blancos falsos, lo que aumenta la invulnerabilidad del Bulavá por parte de la defensa antimisiles. Alexander Jramchijin, experto del Instituto de Análisis Políticos y Militares, también se muestra optimista en cuanto a las posibilidades del nuevo misil para burlar el escudo antimisiles.

- A mi entender, cualquier defensa antimisiles, en principio, no es problema no solo para el Bulavá sino tampoco para todos los misiles existentes.

En total, se construirán 8 submarinos atómicos del proyecto Borey y Borey A, provistos de novísimos misiles. En opinión de los expertos, al poner en servicio los misiles Bulavá, Rusia confirma su estatus inamovible de potencia nuclear. Esto garantiza el mantenimiento de la paridad estratégica tanto con EEUU como con otros países miembros del club nuclear.